Sonríe.

Sonríe.
Cuando ríes el mundo entero ríe contigo, pero cuando lloras, mires donde mires, verás que lloras tú solo.

jueves, 29 de septiembre de 2011

Un primer amor

¿Quién no se ha enamorado con 14 años? Ese amor tan sincero e ingenuo. Algunos dirán que no es amor ,que es tontería. Llamenlo como quieran. Hay tantas clases de amor, está el amor de madre, el amor de padre, de hermana, amor de amigos, amor de abuelas, amor de niños, amor para toda la vida.

Pues bien, yo diré, que el amor entre padres, madres hermanas abuelos, es evidente que existe. El amor de niños, existe. Es más me atrevería a decir que es el más sincero y desinteresado amor que existe. Ese chico al que quieres cuando eres pequeña, chico al que siempre tendrás ese cariño, ese chico al que nunca olvidarás. Podrás querer muchísimo a otros chicos, pero sabes que como ese no habrá otro. Con él descubrimos lo que era querer a una persona que no fuera de tu familia, o una amiga. Con el surgieron los primeros besos, los primeros te quieros, las primeras sonrisas tontas, las primeras peleas de enamorados, las primeras noches en vela pensando en él, las primeras llámadas telefónicas hasta altas horas de la mañana, los primeros " no cuelga tú, no tú ..."

¡Qué bonito es vivir esos momentos! Podemos decir que esas primeras personas, esos primeros amores no significaron nada, que no te acuerdas ni de quien fue ... ¡ESCUSAS! Significó mucho, lo recuerdas cada noche, y le tienes mucho cariño. Y por eso el ha de sentirse afortunado, porque el siempre será especial, será el único que tenga ese cachito tan especial de ti.

Para todos los primeros amores.

viernes, 22 de abril de 2011

Decisiones, cambios, madurar ...

Decidir, desde que nacemos nos lo dan todo elegido, no tenemos nada que decidir, nos ponen la ropa sin preguntarnos si nos gusta, después poco a poco nos van permitiendo elegir a nosotros que ropa ponernos, o qué zapatos van mejor. Empezamos a tomar decisiones. Con el tiempo empezamos a salir y tenemos que decidir a donde, con quien, realmente empezamos a reconocer a los verdaderos amigos, seguimos decidiendo. Pero cuando llega el momento de tomar una decisión, una verdadera decisión, de esas que cambian muchas cosas, ahí, justo en ese momento piensas "¿Desde cuando soy yo la que tiene que decidir por mi?" 
Personalmente odio tener que decidir, eso significa que puedo equivocarme, y bueno, cuando son pequeñas decisiones los posibles errores también son pequeños, pero cuando es una decisión importante la probabilidad de catástrofe es aún mayor, y bueno, el tamaño de la catástrofe mejor ni pensarlo.
La decisión en sí implica cambio, y teniendo en cuenta que el cambio es algo que gusta a muy pocos, mejor no decidir, pensarán muchos (entre los que me incluyo), pero es necesario, debemos hacerlo. 
Tras la decisión y el cambio, y la consiguiente adaptación, piensas: "¿Esto es madurar? No quiero madurar, yo era feliz siendo inmadura, sin preocupaciones, sin pensar en cosas serias, sin decisiones, sin cambios ...". Y es ahí cuando te das cuenta de que es demasiado tarde para volver atrás, que el tiempo no espera, que no te da tiempo a pensar, a reaccionar, a hacer algo para no madurar. Pero ya es tarde amiga, es inevitable. Naces, creces, te reproduces y mueres, nadie dijo nada de madurar, pensar, tomar decisiones... Claro eso viene en la parte de "creces", como siempre la letra pequeña no la lee nadie.
Llegó el momento de decidir, debemos elegir el camino por el que ir.

miércoles, 9 de febrero de 2011

Comentario literario, "Por tierras de España" Antonio Machado

Por tierras de España

El poema Por tierras de España pertenece a la obra Campos de Castilla, escrita por el poeta Antonio Machado. Fue editada en 1912 y posteriormente ampliada en 1917. Este poema se incluye dentro de los poemas pertenecientes a la Generación del 98, aunque otros poemas pertenecientes también a la obra Campos de Castilla son tanto modernistas intimistas como noventayochistas.
Desde la primera línea de Por tierras de España nos expone la naturaleza destructiva del campesino castellano, que entra en escena incendiando pinares, acción exterminadora donde las haya, de lo cual obtiene un despojo de manera violenta como en la guerra, y que anteriormente ha raído y talado los árboles, otras dos operaciones vehementes y devastadoras. Así el hombre incendia, despoja, rae y tala los pinares, los encinares y los robledos de la sierra; efecto del hombre sobre la naturaleza: paisaje humano.
Este poema destaca por los múltiples adjetivos negativos con los que Machado describe tanto a los hombres del campo de Castilla como a la misma Castilla. Aparece patente el tema del cainismo, es decir, presuponer que el hombre es malo por naturaleza, que es unos de los aspectos reiterados en los autores de la Generación del 98, así como el análisis de la intrahistoria, de los personajes reales de los campos que forman parte de la verdadera historia de España. Por este motivo, el poema es un claro exponente de las teorías sobre el hombre español de los autores noventayochistas.
Los personajes que en este poema aparecen son los personajes de la intrahistoria, denominados así por Unamuno, los verdaderos protagonistas, según la Generación del 98, de la historia de España. Así Machado incluye en este poema a “ el hombre de estos campos”, “el hombre malo del campo y de la aldea”, “ es hijo de una estirpe” y “ sus pobres hijos”. Machado se centra en describir a estos personajes, como el fiel reflejo de la tierra en la que viven.
El tema principal de este poema de Machado es una crítica hacia la España de la época, sobre todo destacan los adjetivos negativos que atribuye tanto a los personajes como a Castilla. A los personajes los ve como “hombres malos capaces de insanos vicio y crímenes bestiales, que (…) esconden un alma fea”; a Castilla la define como “tierras para el águila, un trozo de planeta por donde cruza errante la sombra de Caí''. La que nos muestra Machado en Por tierras de España es una visión negativa y sin esperanza de Castilla, y por extensión de España, ya que es el hombre, su habitante, el que al aniquilar al vecino y a la vegetación, se destruye a sí mismo sistemáticamente, y el que destruye el paisaje, al que sólo le queda un vacío desolador que es reflejo patético de su alma.

Los versos que Machado utiliza en este poema son versos alejandrinos(de catorce sílabas) , con rima consonante distribuidos en cuartetos con rima ABAB.
En cuanto a los recurso literarios de sentido,se puede encontrar símiles en “como botín de guerra” o “en cual arco de ballesta”. Aparecen muchos de los símbolos típicos de la poesía de Machado, por ejemplo en “por los sagrados ríos hacia los anchos mares” aparece el símbolo del agua que se considera el fluir de la vida hacia el mar que es la muerte, tópico literario presente en toda la literatura española. En “estirpe de caminantes” aparece la idea del camino como el recorrido por el tiempo y las diferentes circunstancias que colman las vidas. Por tora parte en “al declinar la tarde” se aprecia el símbolo de Machado de la tarde como final de la vida. También aparece personificaciones como en “un alma fea,esclava de los siete pecados capitales” o en “le hieren y acongojan fortuna y malandanza”. También aparece la antítesis en “guarda su presa y libra la que el vecino alcanza”


En cuanto al estilo predomina el estilo nominal, por el predominio de sustantivos y adjetivos lo que dota al poema de un ritmo lento. Destaca la presencia de adjetivos con valor descriptivo, adjetivos especificativos como: : «pobre», «malditos», «rudos», «sufrido», «hundidos», «recelosos», «malo», «insanos», «bestiales», «pardo», «fea», «esclava», «turbios», «sanguinario», «fiero», «bélicas», «errante». Con un denominador común de profunda negatividad y pesimismo.
El poema está escrito en tercera persona del singular, con lo que Machado da al texto un toque objetivo, aunque aparecen también algunos verbos en 2º persona del plural al final del poema, como “veréis” en las últimas estrofas. Machado utiliza en este poema de manera casi absoluta el presente de indicativo. Si bien en su concepto «el verso temporal por excelencia es —como en el Romancero— en -ía», el presente lo utiliza para expresar tanto acciones del pasado: pastores que «conducen» sus hordas de merinos, como del presente: «ve» a sus hijos, como de futuro: «trabaja», «sufre» y «yerra».
El autor hace uso de un léxico popular de la época con palabras como: “ raído”, “pinares”, “encinares”, “lares”, “páramos”, “yerra”, “pastores”, “ ballesta”, “campo”, “aldea”, “ pecados capitales”, ect.
Se pueden agrupar en tres campos semánticos: el primero nos describe su circunstancia, «pobre», «malditos», «rudos», etc; el segundo nos habla de los atributos de su alma: «fea», «esclava»,«bélicas», «errante» etc; y finalmente, el tercero se refiere a la deshumanización de su personalidad: «insanos», «bestiales» «turbios», «sanguinario», «fiero».
El lenguaje es denotativo en su mayoría porque las palabras se usan con su sentido literal. Sin embargo, como hemos visto se puede observar connotación en todos los símbolos y personificaciones que aparecen en el poema.