Sonríe.
domingo, 19 de febrero de 2012
Gracias
Quiero dar las gracias a todas aquellas persona que con el daño que causan hacen que quiera convertirme en una mejor persona. Gracias por hacerme llorar a escondidas, me enseñaron que no tengo que avergonzarme de llorar, que los valientes son los que saben llorar con la cara descubierta, gracias porque gracias a eso encontré a verdaderas amigas que me ofrecían su hombro y su apoyo, gracias porque comprendí que no daña quien quiere, sino quien puede. Entendí que eso de "quien bien te quiere te hará llorar" no es ciertos en todos sus contextos. Gracias, aprendí a reirme de mi, aprendí a valorar los paseos con mis amigos, las tardes de playa, aprendí a valorar las estrellas que brillan cada noche. Gracias porque me esas pequeñas cosas que hacen daño son las que me animan a mejorar, a no ser igual que ustedes, a mirar hacia delante y decir, quiero ser una buena persona y haré todo lo que este en mi mano para conseguirlo. Gracias, porque lo conseguiré.
jueves, 2 de febrero de 2012
Puedes jugar si tienes un motivo
Cuando aceptas la monotonía y no haces nada para cambiar esa situación que cansa, aburre o incluso aflige. Ese es el momento, es el momento de cambiar, de dejarlo todo atrás y empezar algo nuevo. Olvidar lo malo y acordarse de lo bueno. Necesitas cambios, necesitas nuevas emociones. Las cosas no cambian solas. No basta con que te sientes a esperar a que todo cambie, debes hacer algo para que las cosas cambien. No busques el momento perfecto, encuentra el momento y hazlo perfecto.
El cambio nos asusta a todos, pero hasta que no damos el cambio no nos damos cuenta de que era lo que realmente necesitábamos. La monotonía, es aceptable hasta cierto punto. Puedes aceptar la típica monotonía de madrugar cada mañana, de levantarte a la misma hora, incluso de hacer lo mismo cada día durante ¿cuánto? ¿cuánto tiempo estás dispuesto a aguantar?
Si te sientes aburrida, cansada de vivir, hazlo, cambia, da un giro a tu vida. Gritale al mundo lo que quieras, gritale lo que te hace daño, gritale lo que te hace feliz. Es momento de gritar e intentar cambiar el mundo, empezando por cambiar nosotros mismos.
El cambio nos asusta a todos, pero hasta que no damos el cambio no nos damos cuenta de que era lo que realmente necesitábamos. La monotonía, es aceptable hasta cierto punto. Puedes aceptar la típica monotonía de madrugar cada mañana, de levantarte a la misma hora, incluso de hacer lo mismo cada día durante ¿cuánto? ¿cuánto tiempo estás dispuesto a aguantar?
Si te sientes aburrida, cansada de vivir, hazlo, cambia, da un giro a tu vida. Gritale al mundo lo que quieras, gritale lo que te hace daño, gritale lo que te hace feliz. Es momento de gritar e intentar cambiar el mundo, empezando por cambiar nosotros mismos.
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